Los seguros del hogar recogen cada día la factura del servicio técnico por clientes que han tenido que acudir a ellos para la reparación de electrodomésticos, ya que las subidas de tensión eléctrica que se producen en la red eléctrica del hogar producenaccidentes y daños a los electrodomésticos, daños de los que deben hacerse cargo las compañías aseguradoras. Pero no sólo por subidas de tensión se estropean los electrodomésticos, sino también por cortocircuitos o aparatos que se sobrecargan. Estos daños suponen un 10% de las incidencias reclamadas a lo seguros del hogar, que no siempre cubren todas las reparaciones, pero pueden llegar a cubrir tanto el contenido como el continente. Es decir, tanto el electrodoméstico averiado como la instalación eléctrica estropeada.
Dependiendo del tipo de contrato, un seguro cubrirá o no la visita del servicio técnico de reparación al que acudamos. Algunas compañías ponen límites de edad: por ejemplo, dejan de cubrir los daños que pueda producir una lavadora de más de 12 años. Normalmente, si un motivo de incidente aparece en el manual del producto a modo de aviso para evitar accidentes, el seguro raramente cubra los gastos de reparación.
Pero, ¿qué precauciones debo tomar si quiero asegurarme de que mi aseguradora se haga cargo de los posibles accidentes? Aquí va una serie de consejos para tal fin, y algunos otros que son básicos simplemente para la seguridad de su casa:
-Lo primero y más obvio, seguir las instrucciones de uso seguridad de los electrodomésticos.
-Desconectar todos los aparatos eléctricos después de haberlos usado. Y esto incluye cosas como la plancha del pelo, la tostadora, la licuadora… Así se evitan las averías más comunes.
-Si usas calentadores eléctricos (esas mantas o almohadas que proporcionan calor), no dejarlos encendidos sin supervisión, y menos cerca de fuentes de tela, como el sofá o la cama.
-Limpia los electrodomésticos de manera habitual. El polvo es uno de los principales causantes de averías en ellos. Y no sólo eso, sino también los filtros de aquellas máquinas que lo contengan, como lavavajillas o aspiradoras.
-Opta por aquellos electrodomésticos que incorporen el símbolo de doble aislamiento eléctrico.
No manipular los aparatos teniendo las manos húmedas ni estando descalzo. Está mucho más expuesto a sufrir daños por la corriente eléctrica.
-Cuando vayas a desconectar un aparato, tira de la cubierta de plástico para ello, no forcejees con el cable. Así evitarás puntos de separación entre la cubierta y el cable, que expondrán a la superficie el interior de cobre, por donde circula la electricidad.
-Si se te ha estropeado un electrodoméstico y vas a intentar arreglarlo tú en lugar de llamar a un servicio técnico de reparación, recuerda desconectarlo de la corriente antes de manipularlo.
¿Tienes niños?
-Nunca dejes los cables al alcance de los pequeños, mucho menos si están pelados.
-Compra tapas para todos los enchufes del hogar.
-Dejar cerradas las tapas y puertas de los electrodomésticos cuando no se estén usando.
-Evita aquellos electrodomésticos que tengan dibujos llamativos para ellos, para que no puedan confundirlos con un juguete.
-Si puedes, colocar el horno un poco más alto del suelo para que no tengan acceso tan fácil a los mandos.
-Optar por electrodomésticos que no se activen con un toque sino con una acción mantenida de opresión de un botón o panel. Así se evita que los puedan poner en marcha ellos de manera accidental.
-Intentar optar también por electrodomésticos que tengan la función de bloqueo de seguridad, como en vitrocerámicas y lavavajillas. Esto también evitará que se pongan en marcha cuando no deban.
-Ten cuidado con los televisores y otros objetos que podrían caerse de manera fácil si los empujan o apoyan en ellos.
-Asegurarse de que ningún electrodoméstico tenga partes eléctricas que sean directamente accesibles.
-Intentar también escoger los que incorporen enchufes de enclavamiento profundo, esto reducirá las probabilidades de incidentes eléctricos.
Como ves hay muchas medidas para evitar los accidentes en casa. Y para que si ocurren, que los seguros del hogar se hagan cargo de las facturas del servicio técnico de reparación de los electrodomésticos. La seguridad es lo primero, y más si se tienen niños en casa.
